La crisis dot-com, estuvo comprendida entre 1997 y el 2000, debido a una sobrevaloración de las empresas relacionadas con internet, provocando así una fuerte burbuja económica que llevó a la quiebra de grandes empresas.
Todo comenzó en 1997, cuando en las bolsas occidentales se originó un gran crecimiento en el sector tecnológico. Además, grandes empresas alcanzaron un éxito tremendo, tales como Apple, Microsoft y Yahoo!, motivado por el progreso tecnológico y el inicio de la globalización económica.
El NASDAQ (bolsa de valores de las 100 mayores empresas del sector tecnológico) surgió como competidor a la bolsa tradicional de Wall Street. En un ambiente de euforia y optimismo, la bolsa creció a valores superiores a los 5.000 puntos (encontrándose actualmente en los 11.700).
Existieron muchos inversores que obtuvieron grandes rentabilidades, llegando a vender poco antes de que estallara la burbuja, creando grandes éxitos, y haciendo dicho índice aún mas atractivo.
Como hemos explicado, la evolución del NASDAQ se debió al desarrollo de las nuevas tecnologías informáticas, que dieron lugar a la globalización de los diferentes mercados, pasando a operar así en tiempo real.
Todo iba bien hasta marzo del año 2000, alcanzando su máximo apogeo y a partir de donde se produjo una caída en grandes proporciones, originando el cierre de empresas por quiebra y con millones de inversores totalmente arruinados.
¿Por qué? Pues bien, a principios del año 2000, hubo un incremento en los tipos de interés, originando un decrecimiento de las inversiones en este tipo de valores, al encarecerse la financiación para poder apalancarse y obtener mayores rentabilidades.
Existió un miedo generalizado (como en todas las crisis del mercado de la bolsa), originando una venta de acciones masiva, registrada el 13 de marzo del 2000, llegando a una caída del 9% del índice en menos de una semana.
En 2001, el índice se fue deshinchando a toda velocidad, con multitud de compañías echando el cierre por no disponer de financiación (debido al miedo de los inversionistas en comprar acciones). El crash de las dot-com provocó 5 billones de pérdidas de valor sólo en el sector tecnológico.